La REFLEXOLOGÍA HOLÍSTICA PODAL es una especialidad terapéutica que ayuda a la persona a resolver problemas del cuerpo y conflictos del alma.

Es una terapia reflexológica porque se basa en la aplicación de estímulos manuales en las áreas reflejas de los pies. Científicamente no se considera probado este punto, pero sí los efectos que esta terapia provoca en el organismo. Hay numerosos casos de éxito en la aplicación de esta técnica en pacientes con enfermedades graves en que, junto con el tratamiento facultativo, aporta mejor capacidad de recuperación y aceptación del tratamiento farmacológico. Es el caso de la colaboración con niños con cáncer del Hospital de San Juan de Dios.

Es también una terapia holística porque es psico-corporal y por tanto, en las sesiones, se plantean los temas que preocupan a la persona para que reflexione, nunca con la intención de influenciar sobre las opiniones de ésta. Es la misma persona que recorre su propio camino de crecimiento y transformación. No hay ninguna intención de hacer de psicólogo sino de dejar que la persona exprese su malestar ya que en muchos casos en el pensamiento está el origen de nuestro desequilibrio.

El bienestar que se experimenta da la fuerza suficiente a la persona para atreverse a afrontar situaciones que le generan ansiedad, las cuales suelen ser la causa de que se esconde detrás de la sintomatología.

Para personas que buscan un relajación puntual el mismo masaje aporta una sensación de confort que dura más que en otros tipos de masajes. Pero si prolongamos la terapia a unas 6 ó 10 sesiones, es cuando comenzamos a percibir cambios en positivo.

Insomnio

Tensiones musculares y contracturas

Bloqueos emocionales

Fatiga, piernas cansadas

Depresión*

Autoestima baja

Estrés

Dolores de cabeza, migraña

Nerviosismo

Hiperactividad

Falta de atención

Lumbalgias, ciática*

Caída de cabello*

En ningún caso la reflexología podal puede sustituir el tratamiento de un facultativo, ni la medicación que éste pueda recetar.

*Como tratamiento complementario.